El abandono de su madre y una infancia atropellada no determinaron lo que una reina de belleza se convertiría hoy, pues teniendo todo el reconocimiento en certámenes de este tipo ella reconoce que sin la ayuda de Dios no hubiera sido posible sobrevivir a la vida que todos habían señalado para ella.
Tori Hope Petersen, una vida producto de un abuso sexual tenía solo 3 años cuando fue ingresada por su propia madre al sistema de crianza temporal debido a que no podía darle estabilidad a pesar de que eligió tenerla.
Para cuando ella tuvo 15 años, Tori ya había estado en 12 hogares de acogida y romper el propio récord de estar en tantas casas sin ser adoptada, pero ella confiesa que al comenzar a entrenar para atletismo su entrenador “la vio como Dios la ve”.
Durante su adolescencia desarrolló maravillosas cualidades deportivas para el atletismo, convirtiéndose en campeona estatal cuatro veces seguidas mientras estudiaba secundaria siendo la atleta femenina n°50 en toda la historia de Ohio en lograr tal récord.
Pero ella sabía que aun con toda la fama y el reconocimiento como atleta estaba destinada a hacer algo diferente debido a los planes de Dios, ya que en ese tiempo ella comenzó a ir a la iglesia y aprendió sobre Jesús y supo que el Señor tenía planes muy especiales para ella, ya que con las decisiones que había tomado rompió los paradigmas y proyecciones negativas que todos tenían hacia ella.
Cuando se conoció su testimonio en la iglesia, todos le dijeron que estaba “designada” a hacer algo poderoso debido a su fe y su historia hacia otros que también vivieron lo mismo; el hecho de que haya podido tener tantas oportunidades desde su adolescencia para ella representa un “milagro”.
Años después ganó el concurso “Mrs. Universe” (Señora Universo), de donde aprovechó la oportunidad para que todos conocieran la bondad de Dios manifestada en su vida y glorificarle por tantas cosas maravillosas que habían sucedido a pesar de ser abandonada pero contando con el respaldo y apoyo fiel de Dios.
«Solo quería cumplir esa promesa a Dios, diciendo públicamente que ‘Dios hizo esto’ Pero también mirando el milagro que realmente fue, en lo que Dios había hecho en mi vida”, expresó en una entrevista con The Christian Post.
A través una organización sin fines de lucro creada por ella llamada “Beloved Iniciative”, está ayudando a niños que como ella, pasan por el sistema de crianza temporal; allí ella busca cambiar la narrativa o pensamientos acerca de la vida y el propósito que Dios tiene con cada uno de ellos.
«Quería que supieran que incluso si nadie los quería en su hogar, que Dios hizo un lugar para ellos en un Reino, y eso supera a las personas que te echan. Y aunque nadie quiere reclamarte como hijo o hija aquí en la Tierra, Dios dice: ‘Eres mi hijo, eres mi hija’, quería que ese mensaje fuera muy claro”, explicó.
La Sra. Universo desea que otros conozcan la magnitud del amor de Dios que la rescató a ella de vivir una vida en absoluto caos sumergida en el dolor del abandono y los prejuicios, ya que reconoce que sin el trabajo del Señor en su vida no estaría en donde hoy ha llegado.
“Hay personas en la sociedad contra las que instantáneamente tenemos prejuicios. Que simplemente decimos: ‘Oh, esa persona viene de este entorno. Bueno, eso significa que son X, Y y Z’. Y realmente quería impulsar a la gente a pensar de manera diferente sobre los que están en las afueras, las personas que están en los márgenes, porque hubo personas que me vieron como una estadística y luego hubo personas que me vieron como Dios me vio”, dijo ella.
Aun con el temor de hacer distintas cosas nuevas para ella, alienta a que otros puedan determinarse en alcanzar lo que Dios ha propuesto para sus vidas en vez de quedarse atrapado en dichos sentimientos, invitando a que muchos puedan ser obedientes al llamado del Señor.
“Sí, puedes quedarte atrapada en tus sentimientos. Hubo momentos en los que estuve atrapada en mis sentimientos, pero sigue adelante alentando a otros a hacer esa cosa que está en la parte posterior de tu cabeza que está en lo profundo de tu corazón a la que Dios te ha llamado y que sientes que es tu vocación’», aseguró.
