Médico de Inglaterra gano batalla legal que había enfrentado por orar por sus pacientes y recetarle a un paciente acercarse
a Jesús, tras haberle prescrito medicamentos.
Al año siguiente, la investigación recomendó que el Dr. Scott se sometiera a una evaluación psicológica para ver si estaba en condiciones saludables para seguir ejerciendo su profesión.
Al doctor se le vio como no apto para seguir tratando con pacientes, por eso en el 2019 se le pidió que se sometiera a un reciclaje de conducta profesional para seguir atendiendo.
Scott demandó al Servicio Nacional de Salud (NHS) de Inglaterra por esta imposición.
Sin embargo, el NHS demandó al médico cristiano incluso después de que el Consejo Médico General (GMC) dictaminara dos años seguidos que el médico no había violado ninguna de sus pautas y que «la discusión de la fe en las consultas no está prohibida«.
El pasado lunes 26 de septiembre, Richard Scott ganó al NHS en los tribunales, incluida la admisión por parte de los abogados de la acusación de que el médico cristiano es libre de orar por sus pacientes, siempre que siga las pautas de GMC para este tipo de enfoque.
«El costo para mí y mi familia en los últimos años ha sido inmenso y espero que el asunto finalmente se cierre», declaró el médico.