La parlamentaria filandesa que había sido procesada por la justicia al defender los principios bíblicos en cuanto la sexualidad humana ha sido desestimada de todos los cargos que se le acusaban, siendo ésta una gran victoria no solo para la libertad religiosa sino para la libertad de expresión.
Päivi Räsänen, miembro del parlamento finlandés junto al sacerdote luterano Juhana Pohjola fueron acusados de “incitación al odio” de la comunidad LGBT cuando ella citó el libro de Romanos en Twitter, además de tener un panfleto sobre el matrimonio con bases bíblicas y sus declaraciones acerca de la homosexualidad y la fe cristiana en un programa de radio.
Recientemente se conoció que tanto Räsänen como Pohjola fueron desestimados de tales cargos; la parlamentaria expresó por medio de una conferencia de prensa que se sentía “aliviada, feliz y agradecida con Dios y con todas las personas que la habían apoyado” tras conocer la decisión del tribunal.
“Esta es la decisión que esperaba. Aprecio mucho que la decisión reconozca la importancia de la libertad de expresión y la libertad de religión. Me complace que la decisión parezca ser muy completa e inclusiva. Se basa en gran medida en los principios de libertad de expresión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y también repasa cuidadosamente lo que he dicho”, dijo ella.
El fallo del tribunal llegó a las 13 horas del día 30 de Marzo, y en parte del texto se leía que “no corresponde al juzgado de distrito interpretar conceptos bíblicos”, al parecer Räsänen ya había sido informada de la decisión cuando se dio la rueda de prensa, por lo que hasta ese momento no se conocía la decisión en su totalidad.
Asimismo, la parlamentaria resaltó que su caso era muy seguido a nivel internacional debido a la libertad de expresión, pero que dentro de su país la difusión del mismo fue prácticamente nula.
“¿Por qué hubo tanto interés internacional? Porque entienden que si se puede cuestionar la libertad de expresión en la reputada Finlandia, que ocupa el tercer lugar en las clasificaciones internacionales de libertad de expresión, ¿por qué no en cualquier otro país?”, expresó en la rueda de prensa.
Por tres años la parlamentaria ha estado confiando en Dios para un buen resultado aunque fue una temporada difícil, de la cual agradece que le permitió compartir el evangelio y sus enseñanzas con muchas personas.
“Esto se aplica no solo a los cristianos, sino también al derecho de todos a expresar sus creencias. Lo que me ha preocupado es que este proceso, que ha durado casi tres años sin condena alguna, haya tendido a cercenar la libertad religiosa y provocar la autocensura”, dijo.
Esto último hace referencia a que el fiscal del caso le dijo que ella podía pensar como quisiera pero que expresar ciertos puntos de vista se convierte podría ser un delito penal.
“Recordé una situación similar cuando, como Ministro de Asuntos Religiosos, me dijeron que la libertad religiosa también funciona en China: también puedes pensar libremente allí. Bajo la Ley de Libertad de Religión, todos son libres de expresar sus creencias en privado y en público. Espero que el fiscal esté satisfecho con esta decisión. Por supuesto, estoy preparado para defender la libertad de expresión y religión en todos los tribunales, incluso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Pero espero que esto termine ahí”, finalizó.